Bogad, gens classica, bogad!

Los más estimados por Atenea crearon, no sin dificultades, lo que ahora se considera el más justo y representativo de los sistemas de gobierno. Acabar con las Humanidades es herir de muerte a la democracia, socavando al mismo tiempo la educación que queremos. Si las Moiras no lo remedian, en poco tiempo serán muy pocos los que en esta “sociedad de idiotas” lleguen a entender la gracia de este Cupido o aprecien el valor y el esfuerzo por recuperar esta “Irriké” o imaginar quiénes escribieron estas primeras letras de Valentia. Es seguro que vamos a necesitar toda la fuerza que nos proporcione el dulce Falerno y tampoco vendrá mal la divina ayuda de la magia de los nudos…

 Desdichados quienes desde la ignorancia y la idiotez atacan las clásicas enseñanzas y valores, su obtuso "entendimiento" no les deja ver que tenemos la determinación de los espartanos, la sabia “prudencia” de los atenienses, la tenacidad y constancia de los romanos,… y acostumbrada la gens classica a bregar y bogar como esforzados remeros de una trirreme en un océano de servilismo y utilitarismo, seguimos en nuestro empeño de aprender y mejorar en cualquier parte Hispania, incluso en la indómita Gallaecia… Y por si alguien quiere viajar a la Antigua Roma, no le faltarán frases y útiles expresiones, convenientes también si nos damos una vuelta por mi querida Pompeya, superviviente a la sombra del Vesubio... Siempre podremos descansar unos instantes en la Villa de Adriano.

“Nos nos comanda Ares, sino la gran Atenea”, dijo Hermes en la última Asamblea de los dioses. Y así es.