Soñando reposadamente
Abrumado por los fastos infernales que nos han inundado estos últimos días llenos de imagines post mortem, acorralado por los zombis y muertos vivientes del ejército romano y atiborrado de las calabazas de Ceciliano, que no de esas insulsas calabazas huecas, me dispongo a soñar reposadamente y dejar de perder el tiempo…
Me congratula que la nueva ínsula esté protegida por el derecho romano, como debiera estarlo este mapa de casi 100 años. Me alegra que los discentes de la gens classica comiencen a vislumbrar errores que todavía se pagan y se sientan interpelados por antiguas palabras sepulcrales o que los playmobil cuenten nuestra historia. Magnífica labor la de los docentes de la gens, que cual Méntor en todas sus manifestaciones perseveran en mostrar y educar en el mundo clásico, que todavía no ha sido vislumbrado por completo. Escondidos entre el follaje de la modernidad cada poco tiempo surgen minas de oro, calzadas portuarias o hermosas y olvidadas villas, que nos llevan a un pasado que no ha muerto, sino que simplemente ha sido olvidado.
Pero unas cosas nos llevan a otras que en un principio no estaban en nuestra intención, y así, como le ocurrió a Plinio el Viejo, nos sentimos como Ulises y la maldición del mar sin saber si algún volveremos a allí de donde partimos. Queremos ignorar que ese lugar ya no existe como lo conocimos, que allí tal vez se encuentren los orígenes del mal llamado “método tradicional”…
Hermes, sonríe! Pues parece como si negras nubes nublaran tus sueños! Recuerda que la Jornada ya está aquí y que la gens classica la espera con alegre ánimo!
Certeras palabras las tuyas, hermana de variados colores. Raro será que alguien de la gens classica haya olvidado que la IX Jornada de Cultura Clásica de Sagunt ya está cerca, que ya tiene el programa completo. Y si alguien no puede acudir será porque Polifemo lo mantiene encerrado en su gruta… Helios lucirá ese día y el amontonador de nubes ha prometido venir, aunque no sabemos en cuál de sus múltiples formas.
Ya sólo restan diez dias diez.
Me congratula que la nueva ínsula esté protegida por el derecho romano, como debiera estarlo este mapa de casi 100 años. Me alegra que los discentes de la gens classica comiencen a vislumbrar errores que todavía se pagan y se sientan interpelados por antiguas palabras sepulcrales o que los playmobil cuenten nuestra historia. Magnífica labor la de los docentes de la gens, que cual Méntor en todas sus manifestaciones perseveran en mostrar y educar en el mundo clásico, que todavía no ha sido vislumbrado por completo. Escondidos entre el follaje de la modernidad cada poco tiempo surgen minas de oro, calzadas portuarias o hermosas y olvidadas villas, que nos llevan a un pasado que no ha muerto, sino que simplemente ha sido olvidado.
Pero unas cosas nos llevan a otras que en un principio no estaban en nuestra intención, y así, como le ocurrió a Plinio el Viejo, nos sentimos como Ulises y la maldición del mar sin saber si algún volveremos a allí de donde partimos. Queremos ignorar que ese lugar ya no existe como lo conocimos, que allí tal vez se encuentren los orígenes del mal llamado “método tradicional”…
Hermes, sonríe! Pues parece como si negras nubes nublaran tus sueños! Recuerda que la Jornada ya está aquí y que la gens classica la espera con alegre ánimo!
Certeras palabras las tuyas, hermana de variados colores. Raro será que alguien de la gens classica haya olvidado que la IX Jornada de Cultura Clásica de Sagunt ya está cerca, que ya tiene el programa completo. Y si alguien no puede acudir será porque Polifemo lo mantiene encerrado en su gruta… Helios lucirá ese día y el amontonador de nubes ha prometido venir, aunque no sabemos en cuál de sus múltiples formas.
Ya sólo restan diez dias diez.
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