Este miércoles conoce su herencia, ¿y tú?

Con ánimo sereno, como corresponde a la gens classica, y escuchando cómo resuena en el Olimpo la invocación a Fauno, empuño mi caduceo a la espera de que la sombra recorra su camino y llegue ya la hora duodécima del duodécimo mes en el duodécimo año. Hasta ese momento aquí tenéis parte de la herencia que será y que no podría haber sido si no conociéramos nuestra herencia…

Una herencia que parte del otro lado del Mediterráneo, con una música que Eolo recogió en su odre y que hace ya tiempo arraigó entre nosotros con un sinfín de marinos dispuestos a correr innúmeros peligros para regresar a Ítaca a bordo de la Odisea 2013. Tal vez alguna de las naves haga una reparadora escala en el primigenio puerto de Roma para honrar la tumba del victorioso dux et gladiator… Otras dirigirán su trirreme con el vigor de un pez espada hacia el puerto de Lucentum en busca de un pompeyano allí afincado…Otras, embelesadas por la ardiente Helena, se armarán a la manera clásica como Quinto Horacio frente a la estrategia del shock… Las habrá que interrogándose sobre qué pasó en el s.VI aC, se armen con la “utilidad” del griego y conformen la legión de “Lingua Latīna in scholā”… Habralas también, que bien alimentadas con huevos de todas las aves, derroten a ignorantes lotófagos que se empeñan enterrar a las lenguas zombis… Otras desembarcarán en una hermosa bahía y entre colloquium et colloquium prepararán el certificado europeo de Latín y Griego…

Tras semejante singladura todas ellas sabrán responder a la pregunta “Quā rē Graecia?”, “¿Por qué Grecia?” que de tan helénica forma nos muestra Pedro Olalla.

En “Los Sueños de Hermes” conocemos nuestra herencia ¿y tú?