Miercoleando
Siendo mensajero de los coloridos dioses, entre otras muchas cosas, el que escribiendo esto está no puede dejar de rondar entre dioses y hombres ni de atender las múltiples comandas de Zeus, que no me permite demorarme ni un solo grano de arena. Siempre en movimiento, como el agua en unos vasos comunicantes, ora buscando la hispana Ogigia, ora recuperando para la causa a la latina Britania con su hiperbórea Afrodita, ora saboreando al vuelo los insinuantes aromas de la culina o coquina… ora en la compañía de Baco recorriendo los teatros hispanos y los circos de raudas cuadrigas.
Más que un dios me siento como el mankiewiczico Julio César conduciendo a toda prisa al ejército romano hacia Alesia, mientras espolea a sus variopintas tropas auxiliares sin tiempo para algún divertimento del cálamo antes de que amanezcan las Kalendas Novembres con sus mágicos y enigmáticos eventos.
Todo ello sin olvidar mis quehaceres psicopompos, acompañando al actor Nonio a los dominios de Hades, esquivando a la increíble Quimera, que se empeña en confundir las hablas de helenos e hispanos, lanzando con certera puntería unos cuantos falsos amigos contra los jóvenes hijos de la primigenia Pandora, que andan a la escucha de clásicos poemas.
Siendo además de natural curioso, cómo no curiosear en esta nova vocabula auxilii para los recién ciudadanos latinos que reflexionan de symbola conclusa aliisque animi laetitiis, y cómo dejar pasar la ocasión de provocar las cosquillas al Perseus Digital con estas negras fuentes de oscuro licor…
Los dies hebdomadis se deslizan como un suspiro, cual volutas de gas que descubren enterradas villas. ¡Qué tiempos más tranquilos aquellos de los animados Rómulo y Remo, cuando nadie sabía del google sites!
¡Hypnos, acompáñame! ¡Pues hemos de seguir soñando y soñando!
Siendo además de natural curioso, cómo no curiosear en esta nova vocabula auxilii para los recién ciudadanos latinos que reflexionan de symbola conclusa aliisque animi laetitiis, y cómo dejar pasar la ocasión de provocar las cosquillas al Perseus Digital con estas negras fuentes de oscuro licor…
Los dies hebdomadis se deslizan como un suspiro, cual volutas de gas que descubren enterradas villas. ¡Qué tiempos más tranquilos aquellos de los animados Rómulo y Remo, cuando nadie sabía del google sites!
¡Hypnos, acompáñame! ¡Pues hemos de seguir soñando y soñando!
1 comentarios:
Soñando y soñando, para que tus sueños puedan cumplirse y todos los disfrutemos. Ojalá pudieras permitirte, estimado Hermes, un poco de descanso, pero me temo que no es éste el momento. Estamos deseando que llegue la VI Jornada y ver todas las maravillas que has preparado.
Muchos ánimos, divino asesor, que el día tiene 24 horas y no todo debe ser trabajo.
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